WITOTADAS
Como siempre lo he comentado, los viajes, aparte de placer (no todos, hay viajes sin retorno, o ¿será un placer la muerte?) nos dan el vértigo de la aventura. Mi buen amigo Secundino, hace quince días me invitó para viajar a Sucre, la fatalidad llegó a su familia y no pudimos hacer el viaje. Mi madre y la familia nos esperaban, tomé el teléfono y llamé a la vecina para que les avisara que no llegábamos porque la Parca se había llevado al padre de mi amigo. La que recibió la llamada, una señorita universitaria, le cambió el tenor del mensaje, “…se ha muerto Secundino…” y en pueblo chico, esto corre como reguero de pólvora. En casa, la mayoría piensa apoyarlo, por ser mi amigo, humilde como ser humano, muy educado, maneja sus “fichas” (como decimos los peruanos a los que tienen su dinero) y sobre todo, no han visto o escuchado un proyecto mejor: la integración de Sucre con sus caseríos. Al recibir la noticia la familia, la más pequeña, mi sobrina Vitalia, agarrándose la cabeza dijo, “… ¿se ha muerto el señor por el que íbamos a votar?, qué pena…”.
El sábado 7 del presente realizamos el viaje a Sucre, con escala en La Quinuilla. Arturo (conductor oficial con licencia internacional, simpatizante, y carismático), Julio y su bella esposa Marlene con el pequeñín Julio, entramos en un viejo jeep. Aún sentía nostalgia Secundino por su padre, claro, pocos días habían pasado; tratando de llevar la conversación me acordé de alguien que dijo, “La creación suprema de Dios no es la vida, sino, la muerte”, fue como un tónico, pues lo repitió en el velorio que le hicieron en su casa de La Quinuilla. Se juntaron, la madre, los hermanos; para despedirlo con sus familiares más cercanos, sus amigos, sobrinos. No sentí frío, claro, estaba el calor de esa gente humilde, sumado a los rones, cigarrillos, un buen puñado de hojas de coca y su chufrán, ¿cómo sentir frío? Percibí en las conversaciones que hay un gran interés por su candidatura, sumado al respeto que le tienen por su ascendente nivel intelectual y económico. El domingo por la mañana, dispuestos para el viaje a Sucre, la ropa del difunto fue llevada al río para hacer el “cinco”, como le dicen acá a lavar toda la ropa del que nos dejó; cerca al mediodía partimos al Huauco. ¡Inolvidable!, placer y aventura se juntaron para darle un tinte colorido al trayecto, me iba explicando el proyecto de unir los caseríos con el aislado distrito nuestro, ahhh, ya sin rones ni bolo, por si acaso.
Al llegar a Sucre, vía Loma del Indio, nos detuvimos en el barrio La Toma, buscando a mi compañera de estudios, Rosa Sánchez Aliaga (supongo que acompañará a Secundino en su lista), ingeniero agrónomo de profesión, en su casa. La familia que vive al frente de su domicilio nos dijeron que Rosita no había llegado, se comunican por celular, como de paso le dan cuentas por el cuidado de su vivienda. Esos momentos no le tomé importancia a los comentarios que hacían acerca de uno de sus hijos de los vecinos. “Sí pues, sobrino Secundino, estamos preocupados, lo han llevado a Cajamarca y ahí le han sacado clavos y fierros de su estómago, ahora necesitamos una ayuda de los paisanos de Cajamarca para un tratamiento psicológico”. (Seco, atento a la preocupación, les alcanzó una propina). Pensé que se había tragado una cuchara, alguna moneda y mi mente nunca se imaginó que luego vería en las noticias algo de Ripley. “El hombre ferretería”, anunciaba un titular, hasta en las noticias del Messenger de Hotmail “MSN Latino” aparecía una nota. Este caballero se había tragado casi un kilogramo de clavos, ¡Qué cosas eh!
Parece que nuestra amiga, la pelona, ronda muy cerca de nosotros. Don Zenobio Rocha, viejo huauqueño, a los noventa y tres años, partió al encuentro de ella o quizá ella le dio la mano para llevárselo. Aquejado de los males propios de la edad, no soportó el desenlace final. Siempre me pareció un hombre preocupado por su pueblo, pese a su carácter adusto. Tres noches de velorio, los amantes del café estuvimos felices. Mis condolencias del caso a todos sus familiares.
El aniversario del cambio de nombre de “Villa del Huauco”, por el de Sucre se realizó con bombos y platillos el día quince del presente. Parece que nuestro burgomaestre ha decidido lanzarse a la re-elección, y, el derroche de dinero, premios, comida, castillos y un baile al aire libre, fue todo un espectáculo. Sentado en mi puerta, conversando con algunos deportistas de mi edad, se aproximó un concejal a animarnos a que formáramos nuestro cuadro de puros “tíos” y hacerles la competencia a los ancianos que venían de Cajamarca. “Encantado de la vida, voy a apoyar a los señores de Sucre, me parece bien que hayan decidido hacer este tipo de competencias, lo malo es que no lo hayan hecho desde el inicio de su gobierno”. Hasta ahora no puedo entender el por qué los paisanos, cuando hay comida, llevan potes para recibir su ración, reclamando a viva voz que ellos tienen todo el derecho. Jamás he asistido a este tipo de comilonas, ni en mayo, en casa nunca falta una suculenta pitanza hecha por mi madre. Los visitantes de los diversos caseríos tienen la preferencia, ellos vienen invitados, caminando, a veces dejando sus animales a la intemperie, a merced de los amigos de lo ajeno, deben ser los primeros en ser atendidos. No es así, esposas de guardias, profesores, ganaderos, con sus ollas repletas, salen refunfuñando por lo poco que les dieron de comida. ¡Qué tal cuajo Dios mío! El Aniversario en sí, estuvo bien organizado, la gente sucreña y los visitantes festejaron a su manera, y, estoy seguro que se divirtieron de lo más bien. Pregúnteme a mí qué tal estuvo, já.
El domingo quince, mientras en la Plaza de Armas de Sucre se festejaba el aniversario de su creación, miles de profesores rendían el examen para su nombramiento en Cajamarca. Por la tarde una noticia nos sorprendió, una paisana, amiga, estaba detenida en la DIRINCRI (Dirección de Investigación Criminal) por haberla encontrado con las respuestas de la prueba. Me sorprendió digo, porque es una mujer humilde, viuda, con dos hijos. Seguramente quiso asegurar su nombramiento. ¿De dónde proviene esta mafia? ¿Quiénes son los que se benefician económicamente con ello? ¿Se llegará a descubrir, hasta cuándo los profesores tienen que hacer esfuerzos sobrehumanos para conseguir un puesto en Educación? Y amalayas fuera sólo en educación, la Policía Nacional, el Sector Salud, Transportes, el Poder Judicial etc., etc. Como decía un viejo educador, “…todo está hecho una mierda, para todo te sacan plata”. Esperamos que las investigaciones lleguen a buen término y se descubra qué hay detrás de toda esta red de corrupción, por el bien de mi amiga Silvia.
Elmer Rafael Castillo Díaz
DNI: 26731147
Como siempre lo he comentado, los viajes, aparte de placer (no todos, hay viajes sin retorno, o ¿será un placer la muerte?) nos dan el vértigo de la aventura. Mi buen amigo Secundino, hace quince días me invitó para viajar a Sucre, la fatalidad llegó a su familia y no pudimos hacer el viaje. Mi madre y la familia nos esperaban, tomé el teléfono y llamé a la vecina para que les avisara que no llegábamos porque la Parca se había llevado al padre de mi amigo. La que recibió la llamada, una señorita universitaria, le cambió el tenor del mensaje, “…se ha muerto Secundino…” y en pueblo chico, esto corre como reguero de pólvora. En casa, la mayoría piensa apoyarlo, por ser mi amigo, humilde como ser humano, muy educado, maneja sus “fichas” (como decimos los peruanos a los que tienen su dinero) y sobre todo, no han visto o escuchado un proyecto mejor: la integración de Sucre con sus caseríos. Al recibir la noticia la familia, la más pequeña, mi sobrina Vitalia, agarrándose la cabeza dijo, “… ¿se ha muerto el señor por el que íbamos a votar?, qué pena…”.
El sábado 7 del presente realizamos el viaje a Sucre, con escala en La Quinuilla. Arturo (conductor oficial con licencia internacional, simpatizante, y carismático), Julio y su bella esposa Marlene con el pequeñín Julio, entramos en un viejo jeep. Aún sentía nostalgia Secundino por su padre, claro, pocos días habían pasado; tratando de llevar la conversación me acordé de alguien que dijo, “La creación suprema de Dios no es la vida, sino, la muerte”, fue como un tónico, pues lo repitió en el velorio que le hicieron en su casa de La Quinuilla. Se juntaron, la madre, los hermanos; para despedirlo con sus familiares más cercanos, sus amigos, sobrinos. No sentí frío, claro, estaba el calor de esa gente humilde, sumado a los rones, cigarrillos, un buen puñado de hojas de coca y su chufrán, ¿cómo sentir frío? Percibí en las conversaciones que hay un gran interés por su candidatura, sumado al respeto que le tienen por su ascendente nivel intelectual y económico. El domingo por la mañana, dispuestos para el viaje a Sucre, la ropa del difunto fue llevada al río para hacer el “cinco”, como le dicen acá a lavar toda la ropa del que nos dejó; cerca al mediodía partimos al Huauco. ¡Inolvidable!, placer y aventura se juntaron para darle un tinte colorido al trayecto, me iba explicando el proyecto de unir los caseríos con el aislado distrito nuestro, ahhh, ya sin rones ni bolo, por si acaso.
Al llegar a Sucre, vía Loma del Indio, nos detuvimos en el barrio La Toma, buscando a mi compañera de estudios, Rosa Sánchez Aliaga (supongo que acompañará a Secundino en su lista), ingeniero agrónomo de profesión, en su casa. La familia que vive al frente de su domicilio nos dijeron que Rosita no había llegado, se comunican por celular, como de paso le dan cuentas por el cuidado de su vivienda. Esos momentos no le tomé importancia a los comentarios que hacían acerca de uno de sus hijos de los vecinos. “Sí pues, sobrino Secundino, estamos preocupados, lo han llevado a Cajamarca y ahí le han sacado clavos y fierros de su estómago, ahora necesitamos una ayuda de los paisanos de Cajamarca para un tratamiento psicológico”. (Seco, atento a la preocupación, les alcanzó una propina). Pensé que se había tragado una cuchara, alguna moneda y mi mente nunca se imaginó que luego vería en las noticias algo de Ripley. “El hombre ferretería”, anunciaba un titular, hasta en las noticias del Messenger de Hotmail “MSN Latino” aparecía una nota. Este caballero se había tragado casi un kilogramo de clavos, ¡Qué cosas eh!
Parece que nuestra amiga, la pelona, ronda muy cerca de nosotros. Don Zenobio Rocha, viejo huauqueño, a los noventa y tres años, partió al encuentro de ella o quizá ella le dio la mano para llevárselo. Aquejado de los males propios de la edad, no soportó el desenlace final. Siempre me pareció un hombre preocupado por su pueblo, pese a su carácter adusto. Tres noches de velorio, los amantes del café estuvimos felices. Mis condolencias del caso a todos sus familiares.
El aniversario del cambio de nombre de “Villa del Huauco”, por el de Sucre se realizó con bombos y platillos el día quince del presente. Parece que nuestro burgomaestre ha decidido lanzarse a la re-elección, y, el derroche de dinero, premios, comida, castillos y un baile al aire libre, fue todo un espectáculo. Sentado en mi puerta, conversando con algunos deportistas de mi edad, se aproximó un concejal a animarnos a que formáramos nuestro cuadro de puros “tíos” y hacerles la competencia a los ancianos que venían de Cajamarca. “Encantado de la vida, voy a apoyar a los señores de Sucre, me parece bien que hayan decidido hacer este tipo de competencias, lo malo es que no lo hayan hecho desde el inicio de su gobierno”. Hasta ahora no puedo entender el por qué los paisanos, cuando hay comida, llevan potes para recibir su ración, reclamando a viva voz que ellos tienen todo el derecho. Jamás he asistido a este tipo de comilonas, ni en mayo, en casa nunca falta una suculenta pitanza hecha por mi madre. Los visitantes de los diversos caseríos tienen la preferencia, ellos vienen invitados, caminando, a veces dejando sus animales a la intemperie, a merced de los amigos de lo ajeno, deben ser los primeros en ser atendidos. No es así, esposas de guardias, profesores, ganaderos, con sus ollas repletas, salen refunfuñando por lo poco que les dieron de comida. ¡Qué tal cuajo Dios mío! El Aniversario en sí, estuvo bien organizado, la gente sucreña y los visitantes festejaron a su manera, y, estoy seguro que se divirtieron de lo más bien. Pregúnteme a mí qué tal estuvo, já.
El domingo quince, mientras en la Plaza de Armas de Sucre se festejaba el aniversario de su creación, miles de profesores rendían el examen para su nombramiento en Cajamarca. Por la tarde una noticia nos sorprendió, una paisana, amiga, estaba detenida en la DIRINCRI (Dirección de Investigación Criminal) por haberla encontrado con las respuestas de la prueba. Me sorprendió digo, porque es una mujer humilde, viuda, con dos hijos. Seguramente quiso asegurar su nombramiento. ¿De dónde proviene esta mafia? ¿Quiénes son los que se benefician económicamente con ello? ¿Se llegará a descubrir, hasta cuándo los profesores tienen que hacer esfuerzos sobrehumanos para conseguir un puesto en Educación? Y amalayas fuera sólo en educación, la Policía Nacional, el Sector Salud, Transportes, el Poder Judicial etc., etc. Como decía un viejo educador, “…todo está hecho una mierda, para todo te sacan plata”. Esperamos que las investigaciones lleguen a buen término y se descubra qué hay detrás de toda esta red de corrupción, por el bien de mi amiga Silvia.
Elmer Rafael Castillo Díaz
DNI: 26731147
4 comentarios:
Sabes Elmer? no hay caso que Cajamarca está de moda...... vi las dos noticias y me resultaron sorprendentes, el señor de los clavos uffffffffff...... imaginé que era alguien cercano a ti porque en pueblo chico infierno grande jejeje.....
Lo de la maestra..... sin comentarios :( no la juzgo pero que estaría pasando por su cabeza en ese momento .... besos tio Elmer XD***
Paty:
Cierto, "Pueblo...", as{i como es hermoso vivir en Sucre, también est{a el otro lado terrible, siempre tienes que guardar un perfil bajo, la marea sube cuando te extralimitas, felizmente no padezco de juventudes atrazadas, ya la madures a llegado a mi alma como un remanso.
Gracias Patricia, parece que el resto, salvo Yoyita est{an por acá.
Un abrazo : Elmer
El viaje sin retorno si es placentero. . . solo que como todo. . lo desconocido intriga o da miedo. . .
Bien por la historia Negrito. . .como siempre . es grato leer tus aventuras. .
Un abrazo con cariño para ti. . .
Merci Eréndira:
Gracias por el comentario Eréndira...se te extrañaba.
Chao
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