WITOTADAS

Nuestros viejos profesores siempre tendrán algo qué enseñarnos. Sin duda. En estos carnavales me comentaba, un viejo profesor, que toda su vida fue “muy miedosazo” (miedoso) y el silencio de Sucre por las noches, le aterraba en su inmensa casa. Prefería el bullicio de la ciudad de Trujillo y que en casa siempre había compañía.
Entendí lo del miedo, cuando te adentras en él, no tienes escapatoria. Y lo peor, solo.

Gringo, por qué no te consigues una pareja, tus hijos son adultos y van a entender. Te vienes con ella a vivir a tu Minopampa, tú tienes ya tu edad y necesitas mucha tranquilidad. Trujillo tiene un alto índice de delincuencia y se ha convertido en una ciudad peligrosa, acá, con tu parejita, van a estar sosegados y seguro, una vez al mes, vas a gozar de los placeres que te pueda brindar una dama. Y vas a vivir muchos años más sin preocupaciones.

Con ese tono parsimonioso que la vida le ha dado, me contestó.

¿Tú crees, mi estimado Elmer, que las canas reflejan Vejez (dándole énfasis)?, para nada. Que se te caiga el pelo ¿es síntoma de Vejez?, tampoco. Que te des uno al mes, eso, eso sí es Vejez.

Wito…