
ODA A LA COBARDÍA
“Los cobardes mueren muchas veces antes de morir”. (Mahatma Gandhi)
Desde hace mucho sentía la curiosidad de saber si cobardía era sinónimo de miedo. Hemos dicho, escuchado decir y a veces decirnos, “Qué cobardazo eres para las agujas, o, aviéntate a la costilla, no seas cobarde”. Lo último sin alusiones personales. La RAE (Real Academia Española) textualmente dice, “Cobarde: (del francés Couard). 1.- adj. Pusilánime, sin valor ni espíritu”. Y miedo, sigamos leyendo, “Miedo: (del lat. Metus). 1.- Perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario. 2.- Recelo o aprensión que alguien tiene de que le suceda algo contrario a lo que desea”. Entonces miedoso, sería aquella persona que tiene miedo de cualquier cosa. ¿Dónde está la diferencia?
Me parece que el miedo lo puede sentir hasta el más valiente de los hombres. He leído en alguna parte que un “Marine” (fuerzas de élite americanas) salía despavorido de su cuadra al ver un ratoncito. O el famoso Arnold Schwarzenegger, protagonista de la película “Comando” y muchas veces Mr. Mundo por su físico corporal envidiable e insuperable, se metió debajo de unas mesas cuando un jovenzuelo de 16 años asaltaba el centro comercial donde, éste, hacía sus compras.
¿Quién no ha sentido miedo al acercarse un examen de matemáticas, o, al diagnostico del médico cuando vas por alguna dolencia? El miedo es provocado por algo concreto, por ejemplo, a las cucarachas, las arañas, a las alturas. Los haraganes al trabajo; los sucios al agua, los tímidos a la respuesta de la amada, a lo desconocido y las almas de los cuentos de la abuelita, al Dios impuesto por las religiones, al papá y los hermanos de la enamorada, a los viajes en avión, a los terremotos, al padecer una enfermedad incurable, a la muerte...Todo esto se podría llamar “fobias”, que sí es el sinónimo de miedo. ¿Quién no ha sentido miedo a quedarse sin Madre? Y a eso jamás lo podríamos llamar cobardía. Tener miedo no es malo ni bueno cuando los enfrentamos.
Mientras que la cobardía abarca una patología emocional arraigada desde la niñez. Ahí tenemos el caso de Humberto Grieve, el hijo del alcalde en “Paco Yunque” (César Vallejo), niño que lastima y ofende sin motivo a Paco, sólo por cobardía. La cobardía es uno de los más grandes defectos humanos, es rastrero, porque saben que a quienes les afecta no pueden defenderse y que muchas veces lo hacen desde la oscuridad. Tenemos a aquellos que se ocultan en el anonimato para lastimar, denigrar y hasta asesinar al que creen que es su enemigo.
Podría señalar a las huestes de Sendero Luminoso como cobardes. Atacaban en la oscuridad y por las espaldas a los Guardias Civiles de ese entonces, dizque, para arrebatarles el armamento y encima, era el mandato y las órdenes de su Presidente Gonzalo, sobre todo, los vítores de alegría luego de su macabra cobardía, ¡Dios!, qué patético. O los de las Fuerzas Armadas que entraban a las comunidades a violar, robar y matar cobardemente; niños, mujeres, ancianos y animales. También tenemos a los violadores de los niños (de temer los sacerdotes), viles sujetos despreciables, que aprovechando la ventaja de sus fuerzas, abusan de ellos. Pero hay también los cobardes de corbata, que aprovechándose de su envestidura se aprovechan de ello para cometer barbaridades y media con su personal.
Un punto aparte son los cobardes que denigran a las mujeres por el simple hecho de ser superiores, intelectualmente, económicamente y físicamente a éstos, los llamados misóginos. Desde hace mucho el concepto de que ellas dependen de los varones, para subsistir y vivir en el mundo, ha quedado obsoleto. Hasta para nacer dependemos de ellas. El que no tiene respeto por una mujer se vuelve automáticamente en un pusilánime. Por ellas hay que tener cortesía, admiración, tolerancia, como dice ese viejo adagio, “A las mujeres no hay que entenderlas, sólo hay que amarlas”.
Los cobardes siempre buscan excusas, pese a saber que lo que hicieron, hacen y van a hacer, es contraria a toda lógica moral, ética y sentido común. Muestran su sonrisa estúpida queriendo se apoyados por alguien, creen que se basan sobre normas sociales. Éstos no necesitan de un arma para asesinar a alguien, suficiente es que su lengua viperina o su pluma (pésima por cierto), lancen los dardos envenenados de calumnia contra aquellos que envidian, temen y odian. Éstos casi siempre se disfrazan con la prudencia, con legalismos increíbles, fuera de todo sentido común…escabulléndose con el rabo entre las piernas, eso sí, sacando pecho, para que nadie sospeche de su cobardía.
Pregunto, ¿quiénes son éstos infames para lanzar gratuitamente palabras y párrafos enteros llenos de calumnias y odios? Sus actos despreciables tratan de ocultarlos dándoseles de puros. ¿Por qué se preocupan tanto de la vida, actos y el caminar de los otros que ni siquiera dan la vuelta a mirarlos porque su olor es inconfundible? Porque el olor de la mierda es mejor que la de ellos. Nadie tiene el Dominus Veritas, mejor dicho, nadie es Dueño de la verdad. Si ellos no hacen nada malo, ¿por qué les preocupa tanto lo que hagan o hicieron los demás? O acaso ¿es esa sensación de culpabilidad lo que les hace decir y escribir para liberarse de ello?
Si es que existe ese “Barba blanca”, será el único que podrá juzgarnos de todo aquello que hicimos o dejamos de hacer en este “Valle de lágrimas”. Pero me quedo con la genial frase de Vallejo, “Cualquiera que sea la causa (pecado) que tenga que defender ante Dios más allá de la muerte, tengo un defensor: Dios”.
Wito…
7 comentarios:
Mi querido Negrin, tu sabes que : El cobarde se llama a sí mismo prudente y esto pues con el afan de tratar de encerrar algo de lo cual nunca tuvo o quizo tener claro conocimiento de su pobre realidad. Que podemos decir nosotros comunes mortales que sabemos que Todo hombre lleva en el alma un cobarde y un héroe.
Un abrazo fraterno.
Edwin Tinoco
Miami, Florida
USA
Bien Negrito , excelente el texto con un contenido desnudo , claro y elocuente,
de aquellos que te motivan a enfrentar los miedos y también los retos.
Un Abrazo,
Milton
Hola Edwin y Milton:
Primero agradecerles por los comentarios alturados y llenos de verdad.
No hay nada peor que ser un ser ruin y sin escrupulos, sobre todo si llegas a una edad que debería servir para ser dicretos y tratar de ser mejores.
Felizmente en nuestro pueblo hay pocos, o, habrá muchos? quién sabe, verdad?
La cobardía siempre va a existir y a ésta, hay que evitarla con todas nuestras fuerzas, el miedo tratemos de canalizarla para que no nos dañe ni dañe a los de nuestro entorno.
Un abrazo mis queridos amigos...fuerte como a un árbol.
Elmer
Hola Edwin y Milton:
Primero agradecerles por los comentarios alturados y llenos de verdad.
No hay nada peor que ser un ser ruin y sin escrupulos, sobre todo si llegas a una edad que debería servir para ser dicretos y tratar de ser mejores.
Felizmente en nuestro pueblo hay pocos, o, habrá muchos? quién sabe, verdad?
La cobardía siempre va a existir y a ésta, hay que evitarla con todas nuestras fuerzas, el miedo tratemos de canalizarla para que no nos dañe ni dañe a los de nuestro entorno.
Un abrazo mis queridos amigos...fuerte como a un árbol.
Elmer
Wito: Agregaría al comentario de los amigos un pensamiento de Confucio: "La peor cobardía es saber qué es lo justo y no hacerlo". Un abrazo mi querido DT.
Hola Negrito lindo...
Gracias por la aclaración, ahora si lo entiendo con total claridad. Asi hay personas cobardes amigo mio..... que con ganas se les tuerce el cuello, verdad?.
Un beso!!!
Claribel Rosario Sánchez Ludeña
Leo alucinada.... besos Elmercitoooo :*
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