WITOTADAS
Hay decisiones que no
tienes que pensarlo ni un milésimo de segundo, dices ¡Si! O ¡No!, instantáneamente, sin dudarlo. El “no
sé; voy a ver; te respondo, te llamo, te envió un mensaje a tu Facebook (más
cibernético)” o, después de pensarlo mucho, “no se puede Cholo, estamos full;
por la tarde te caigo, seguro”. Estos últimos son de nuestra vida cotidiana,
vivimos a diario con este tipo de decisiones. Tiendo mi cama o lo dejo para
mañana, tengo pereza; el sábado lavo mi ropa interior, sigo con pereza; hoy no
tengo ganas de escribir, me asusta la página en blanco y aparte de eso, para
variar, la pereza… Con el agravante de
estar en Sucre, donde la apacibilidad es conmovedora y angustiante y eso lo
hace sinónimo de la pereza. Si no habría una Biblioteca donde encuentro mi
vicio preferido y, no hubiera contratado “Pirata WiFi” como mi servidor de
Internet, seguro que tendría problemas emocionales. Es un problema
acostumbrarse a la modernidad y seguir con ese vicio solitario de la lectura,
no el otro eh.
En alguna ocasión
manifesté que, acá, en Sucre, todos, digo todos sin excepción, somos familia.
Cosa curiosa, ningún apellido coincide con el que es nuestro primo hermano,
algunos entenderán. Y si tus padres han sido del Huauco, ahora Sucre, va a ver,
de todas maneras, grados de consanguinidad con las descendencias. Y vayan a ver
cuando los viejos huauqueños nos dicen, “… es tu tío, o tu primo, o tu sobrina…
muy cerquita”, así que no es raro que nos escuchen saludar con un “Hola
primito; tío o tía buenos días; sobrino cómo estás”, cuando nos paseamos por
las calles solitarias de nuestro hermoso Sucre con los familiares que nos
cruzamos por ellas. Por eso Mayo, aparte de la gran devoción por el Viejo
Ishico, Patrón del pueblo, es una fiesta netamente familiar. Con sus pasiones
desbordantes y tan peculiares en cada unos de nosotros, vivimos la vida que nos
ha tocado vivir, tratando de no lastimarnos y queriendo ser mejores cada día.
Una de mis frases
favoritas y que hasta ahora no sé de quién es, pero la escribí en alguna
ocasión como inicio para un artículo acerca de mi buen amigo Edwin Tinoco Silva
en El Labrador: “Es fácil simpatizar con las penas de un amigo, lo difícil es
simpatizar con sus éxitos”. Quisiera escribir de alguien con el cual simpatizo
con sus éxitos. Hay familiares en nuestro pueblo que son verdaderos amigos. Uno
de ellos es Gustavo Adolfo Aliaga Díaz, quien a pocos les debe desagradar y
muchos lo respetaran y dirán que es un “buen tipo”, como dice el locutor
argentino de Fox Sport. El repetir de año por no marchar y abandonarme a los
“placeres paganos”, según los Testigos de Jehová, a mis 14 años, hizo que fuera
su compañero de carpeta, en mi nuevo salón y con mis nuevos amigos de tercero
de secundaria en el Colegio Nacional Mixto San José de Sucre.
Anécdotas mil, como el
del Basurerito cuento corto, que lo escribí por esos años y que corregí hace
algunos años y otro, en la Escuela de Guardias (siendo él Brigadier General de
la Escuela de Oficiales), que la he contado innumerable veces en reuniones baquianas; los encuentros sabatinos en algún
huarique de Jesús María o El Agustino; invitando a las “costillitas” para un
fin de semana, una amiga huanuqueña me dijo, “…cómo va ser cadete de cuarto año
de la Escuela de oficiales de la Benemérita Guardia Civil en Chorrillos, debe
ser cadete del colegio Militar Leoncio Prado, porque porte militar tiene este
chibolo”, tenía razón la bella Ansha. En Huánuco lo encontré en cierta
oportunidad, egresados ya, cuando la ciudad tenía una pequeña epidemia de
conjuntivitis y la mayoría andaba con lentes oscuros, al preguntarme el nombre
de tal virus se mato de la risa al saber la respuesta, “cannabis sativa”.
Nuestra amistad siguió creciendo con los años, sus éxitos no tan sólo eran o
son de él, sino, de todos los que lo conocemos y sentimos cariño, por cómo lo
llamen: Gustavin, Gustavito, Palomo, La res…no recuerdo otra. Siempre le
diremos, “Felicitaciones por tus logros querido amigo”.
Los primeros días de
julio, la prestigiosa Universidad de ESAN (Escuela Superior de Administración y
Negocios), nuestro amigo Gustavo recibió la Maestría en Gestión Pública. Cuando
a Susana Castillo le conté que había ido a la ceremonia de mi amigo y familiar,
me dijo, “…seguro tu primo es muy inteligente o como decía mi papá, es un
capo”, me lo dijo sin conocer quién, ni saber qué, ni cómo es Gustavo, sólo
dijo eso. Con seguridad se refería al valor de la entidad educativa de donde
egresaba Gustavo, como diciéndome, “…cualquiera no sale con una Maestría de la
ESAN”. Lo decía alguien egresada de la “Université Paris 8 Vincennes-Saint
Denis”, más explicaciones no se puede pedir. Esto es un éxito más para nuestro
viejo amigo. Sobretodo, sobreviviendo en esa jungla de corrupción donde se
mueve a diario y aún seguir ileso, esa es tu mayor victoria, que todos tus
amigos y familiares y los que te conocen quieren seguir viendo en ti mi
estimado Gustavin. Vienes de un padre, del cual se pueden decir mil y una
conjeturas (para bien o mal), pero jamás se escuchó decir que fue corrupto y,
de una madre abnegada y leal a su familia y con orgullo, huauqueños.
Que los éxitos sigan
llegando, ¡edad y ganas de vivir!, aún hay. La bohemia es muy difícil que se
les vaya a los soñadores, ¡Salud amigo!
Wito…
1 comentario:
Felicidades a tu amigo mi querido Elmercito...besos ^.^
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